Esta sección ofrece una selección de exposiciones programáticas vinculados al fenómeno de la Figuración Postconceptual acompañadas de una ficha técnica y una selección de las obras presentadas y los artistas participantes, accesible a través de un buscador alfabético. La incorporación de nuevos contenidos se realizará progresivamente.

 

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CHEMA COBO


Tarifa 1952

Reside y trabaja en Málaga

 

 

 

Representante de la Nueva Figuración Madrileña. Vinculado a las galerías Buades y Siboney.

 

Chema Cobo cuestiona el mundo de forma provocadora e inquietante, y concibe la pintura como acto conceptual a través del cual se manifiesta el pensamiento. En su obra las imágenes se liberan de la dictadura de su representación habitual sumergiendo al espectador en un universo intermedio donde sueño y realidad se entrecruzan.

 

Cobo plantea el arte como una manera sensorial de hacer filosofía. Su formación en este campo, y el interés por la obra de Nietzsche, Ciorán, Adorno o San Juan de la Cruz, han influido en su modo de escapar del enigma de las sombras y llegar a la idea. Su visión es la de un nómada intelectual aficionado a la paradoja, con un sentido del humor extremadamente afilado obsesionado con edificar construcciones intelectuales, entre lo verbal y lo visual, para destruirlas silenciosamente.

 

Obsesivamente heterodoxo, desde sus inicios ha defendido el papel del artista como fingidor desdoblándose en diferentes máscaras con el objetivo de borrar las huellas del yo, explorar la identidad personal y cultural, o cuestionar la historia. Su escepticismo como forma de estar y manera de ver, unido a una inmensa capacidad de síntesis, le ha permitido fagocitar líneas de pensamiento o claves estéticas sin prejuicios en su obra.

 

Cobo pinta para desorientarse, por el gusto del extravío y el misterio del enigma, conduciendo las imágenes al límite de la simulación mediante semillas de incertidumbre como el azar y la mutabilidad. Contra el exceso de información actual, defiende una pintura amnésica que exige un tiempo a la mirada. Encuentra en la deconstrucción del lenguaje uno de los posibles desarrollos de la práctica artística. Una utilización irónica y cínica de la palabra como rechazo del mundo tal y como se presenta.

 

Su larga travesía artística incluye diferentes periodos en los que aborda la reinvención de la pintura a través de la hibridación, la dramatización de los expresionismos o el cuestionamiento del poder de representación de la imagen. Una cartografía personal trazada en mapas intertextuales donde destacan el sarcasmo encarnado por la figura del Jocker, las metáforas de la memoria a través de la iconografía y la poética del Estrecho o las reflexiones en torno a la identidad, la apariencia o el reflejo.

 

Entre sus referentes pictóricos destacan: Gerard Richter, J. B. Kitaj, Marcel Broodthaers, Rembrant o Velázquez.

 

Bibliografía consultada: Villaespesa, Mar, “El pez que se muerde la cola”, Atkins, R y Watson, S., “Chema Cobo: la psique como sitio, cita, vista”, Castro Flórez, Fernando, “Rituales, mapas, laberintos, espectráculos” y “Me confundo. A la deriva de las especulaciones barrocas”, en el catálogo de la exposición Chema Cobo. El laberinto de la brújula, Sevilla, CAAC, 1998. Carey-Kent, Paul, “Chema Cobo: the Jocker off-stage”, Umbría, Ana, “Last supper/last news”, en el catálogo de la exposición Chema Cobo. Out of frame, Málaga, CAC, 2010.

 

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